miércoles, 30 de abril de 2014

La formación online, un nuevo paradigma y gran oportunidad

El nuevo contexto que nos ofrecen las TIC en cuanto a la flexibilización de escenarios y modos de enseñar y aprender nos sitúa ante un nuevo paradigma. Hoy por hoy ya es posible replantear las comunicaciones y formas de colaboración entre las personas, estimulando su proceso formativo y multiplicando el potencial educativo de los numerosos recursos y materiales disponibles.

Cuando en la década de los ochenta del siglo pasado, con la aparición del ordenador personal, se comenzó a utilizar estos equipos con fines educativos y como instrumento de apoyo para realizar algunas tareas individuales, se acuñó ya el término de “enseñanza asistida por ordenador”.


A partir de entonces, su carácter ha ido evolucionando con la consolidación de Internet y los nuevos lenguajes multimedia, así como por la potente diversificación de las dinámicas interactivas de comunicación impulsadas por la web 2.0.


Gracias a todo ello, ha sido posible establecer una relación cada vez más estrecha entre las TIC y las crecientes posibilidades innovadoras que ofrecen para mejorar sensiblemente la calidad de la enseñanza y el aprendizaje.


Es así como se ha ido consolidando una realidad distinta que representa, a su vez, una gran oportunidad; un nuevo modelo o paradigma educativo que agrupa a los procesos de enseñanza y aprendizaje que se llevan a cabo a través de Internet y apoyándose en las TIC. Se la conoce normalmente como formación online, electrónica o digital.

Por otra parte, estos procesos de formación online han planteado la necesidad de proceder a la creación de un tipo de entornos o espacios digitales específicos a través de los cuales los centros puedan implementar estas nuevas dinámicas educativas y que han recibido la denominación de “campus virtual”, como entidad diferenciada con respecto al aula o campus físico tradicional.


Estos “campus virtuales”, en la medida en que sepan integrar bien el valor añadido que las TIC pueden aportar, están llamados a convertirse en unos instrumentos muy efectivos para potenciar estrategias educativas innovadoras, ya que están orientados a favorecer la adquisición de una serie de competencias y destrezas adicionales por parte del profesorado y del alumnado y a ser mucho más que unos repositorios para facilitar el acceso a abundante información o contenidos educativos digitales, por bien organizados que estén.


Un “campus virtual” que esté bien planteado deberá distinguirse por la combinación de diferentes elementos tecnológicos para los que cada centro podrá decidir la mayor o menor profundidad con que estén desarrollados.


En cualquier caso, ha de estar claramente diferenciado y ser capaz de configurar un entorno digital que posea las características siguientes: 



 

Así pues, podríamos decir que todavía se están viviendo las primeras fases de la formación online y de las “aulas o campus virtuales” y que todavía queda mucho por experimentar y materializar con respecto a sus potencialidades educativas actuales y, sobre todo, futuras.

Sin embargo, sí parece ya contrastado que se trata de un nuevo modelo que representa una gran oportunidad y que introduce modificaciones sustanciales con respecto al paradigma tradicional, además de ampliar netamente las fronteras de la enseñanza y el aprendizaje.

jueves, 24 de abril de 2014

Dipity, una aplicación web muy versátil para la creación de líneas del tiempo



La configuración de líneas o cronologías del tiempo para la presentación de distintos eventos y hechos históricos constituye uno de los recursos más comunes en las aulas, acumulando una larga tradición en formato papel y soporte gráfico de las pizarras de siempre.

Sin embargo, gracias al desarrollo de múltiples herramientas TIC específicas para el diseño de líneas del tiempo se nos ha abierto un nuevo abanico de posibilidades y opciones educativas, tales como: 


  • Hacer trabajos cronológicos sobre sobre diferentes temas (según la materia que sea):
    1. Identificación de distintos períodos o acontecimientos a lo largo de la Historia
    2. Cronología de diferentes corrientes literarias
    3. Evolución de estilos musicales, de la discografía de un músico,
    4. Elaborar secuencias en el tiempo sobre noticias de actualidad, etc.
    5. Trabajar la narración: por ejemplo incluir las imágenes para que los alumnos inventen una historia oral o la escriban al lado de la imagen, o al contrario, haya texto escrito y se incluyan imágenes (en inglés o francés, para trabajar comprensión)
  • Para la presentación algún acontecimiento vivido (viaje, excursión...)
  • Para la organización/temporalización de diferentes actividades: realización de tareas prácticas; entrega de trabajos; salidas y excursiones previstas; programación de una evaluación o una unidad didáctica concreta. 
  • Como cuaderno de aula/ portfolio del alumno, en el que ir resumiendo de las actividades realizadas en un curso referidas a X: actividades con ordenador, proyectos, actividades de laboratorio
Veamos algunos ejemplos
Entre las distintas herramientas que podemos encontrar para la realización de líneas del tiempo, en esta ocasión nos adentraremos en Dipity, una aplicación web gratuita bastante fácil de manejar, gratuita y que nos ofrece múltiples opciones multimedia y 2.0.

Podemos generar una línea del tiempo en base a la consecución de una serie de eventos en los que podemos incorporar:

  • Un título
  • La fecha
  • Una breve descripción
  • Imágenes
  • Videos
  • Enlaces web
  • Ubicación del evento

A partir de ahí podemos llevar a cabo una línea del tiempo bien de manera individual o colaborativa, dando posibilidad de interactuar a más de una persona en un mismo trabajo.

La línea del tiempo la podremos visualizar de 4 formas distintas: 1) Como línea del tiempo; 2) A modo de lista; 3) En formato libro,4) En contexto de un mapa, siempre y cuando hayamos introducido previamente la localización de cada evento.


En función de la utilidad educativa que le hayamos dado, nos interesará elegir una modalidad u otra, pudiendo pasar de una a otra de manera automática.


Dipity también incluye distintas utilidades 2.0, como la opción de permitir la realización de comentarios en cada evento o en la línea del tiempo en general; ofrece también la posibilidad de utilizar los feeds de servicios como Twitter, YouTube, Blogger, WordPress, Last.fm, Picasa, etc.


Su principal limitación: En su modalidad gratuita tan sólo nos deja almacenar 3 líneas del tiempo distintas al mismo tiempo.


Para indagar un poco más sobre Dipity, a continuación te dejamos una serie de enlaces que esperamos te resulten de interés.

martes, 22 de abril de 2014

Algunas aclaraciones y recomendaciones sobre el uso de Facebook (II)

Una vez extraídas las principales diferencias entre un perfil y página de Facebook, es hora de pasar a analizar bajo qué características y pautas de funcionamiento deberíamos aplicar a la página de nuestro centro educativo.

Con dicho propósito, trataremos de responder a las siguientes cuestiones:

 

¿Qué nivel de supervisión y gestión puede aplicarse en una página de Facebook?

A decir verdad, hoy por hoy se puede configurar una página de Facebook tan abierta y dinámica o tan cerrada y estática como queramos:

1. Tenemos la posibilidad de generar una página en Facebook a modo de “escaparate”, de forma que las personas que visiten la página no pueden dejar en el “muro” (la parte pública de la página) ningún comentario, ni subir una foto, un video etc..

En este caso, la actividad de la página se limitaría a la publicación de aquellas noticias, informaciones, etc. que generasen los administradores de la página (quien tuviese permiso para hacerlo), pero no habría opción de reflejar un “feedback” (respuesta o interacción) público por parte de las personas que visitasen la página.

Tan sólo nos podrían llegar los comentarios, opiniones etc. de las personas que visitasen la página por una vía restringida y “privada”, de forma que sus mensajes o comentarios permanecerían “ocultos” y no serían conocidos por el resto de visitantes.

2. También se puede elegir el configurar una página de Facebook permitiendo la participación y el “feedback”, pero estableciendo ciertos “límites y/o filtros”.

  • De esta forma, podemos determinar que aquellos a quienes les gusta la página puedan escribir comentarios, pero no subir videos o fotos, de manera que podrán añadir texto, pero no elementos multimedia, por lo que no habría “riesgos” derivados de usos indebidos de imágenes, videos, etc. Además, también en este caso los administradores dispondrán siempre de la opción de eliminar cualquier comentario que se haya publicado por considerarlo inapropiado.
  • Junto con ello, si somos nosotros quienes subimos imágenes, determinar si los “seguidores” de nuestra página están autorizadas para etiquetar esa imagen. Esto es, podemos decir si tienen permiso para identificar cada foto hacia terceros.
  • Como medida cautelar adicional, Facebook ofrece también la posibilidad de generar un listado de “palabras malsonantes”, de forma que, si apareciese alguna de ellas en cualquier texto o comentario, dicho comentario pasaría a ser considerado “spam” y no aparecería en la parte pública de la página.
  • Igualmente, también puedes activar el filtro de “expresiones groseras” que viene ya previamente determinado por Facebook.

3. Existe también la posibilidad de optar por generar una página de Facebook en la que no queden establecidos con carácter previo límites o filtros “preventivos”, de manera que se pueda generar una amplia comunidad de participantes, que se expresen libremente y aporten su granito de arena al proyecto, opinando sobre “sus pros y sus contras”.

De esta forma, cualquier seguidor podrá subir aportaciones de tipo texto y también de tipo multimedia (imágenes, videos,…) a este tipo de página de Facebook.

No obstante, en ningún caso estaríamos hablando de la posible inserción de comunicaciones “anónimas” ya que, cada publicación ha de estar vinculada a un perfil particular de Facebook, si bien siempre existirá el riesgo de que alguien quiera mantenerse en el anonimato escondiéndose tras un “perfil falso”.

Así pues, aunque es cierto que en principio no tendría por qué registrarse ninguna participación malintencionada, ese riesgo potencial existirá siempre y más, cuando la página corresponde a una institución a la que están vinculadas un importante número de personas.

En cualquier caso, no debemos olvidar que siempre cabrá la posibilidad de que los administradores eliminen con posterioridad cualquier contenido o aportación que haya sido subido a la página de Facebook y no les parezca correcta.

Cómo gestionar comentarios en FacebookA este propósito, pueden resultarde ayuda las recomendaciones que se realizan en el siguiente diagrama sobre la gestión de comentarios en Facebook:

¿Cuál puede ser la mejor opción para un centro educativo?

A la luz de las aclaraciones expuestas y de las diferentes posibilidades descritas, si tomamos en consideración la función que desempeñan las redes sociales en general y Facebook en particular, entendemos que la opción más recomendable para un centro educativo, podría ser la siguiente:
Generar un página de Facebook con el nombre corporativo del centro en la que se establezcan desde un principio ciertas pautas de filtro/control, de manera que podamos evitar riesgos y/o disgustos posteriores, pero que no sean tan restrictivas que eliminemos toda posibilidad de que se genere cierta actividad participativa y de intercambio en torno a ella."
Debemos tener en cuenta que una de los principales objetivos de las redes sociales es el facilitar el intercambio de testimonios, información, material, etc. de interés, para lo cual es necesario que quienes nos visiten puedan:
  • Expresarse libre y correctamente y emitir sus opiniones o comentarios sobre nosotros.
  • Recomendar la página a terceras personas
  • Extenderla y darla a conocer a otros potenciales seguidores
Todo ello, con el objetivo de proyectar por nuestra parte la imagen de que formamos una Comunidad activa y abierta, consciente de la sociedad en la que vivimos y que quiere hacerse bien presente en las nuevas realidades digitales y de comunicación 2.0.

Por último, resaltar que es importante que no perdamos de vista en ningún momento que la configuración de la página de Facebook podrá ser modificada por sus administradores cuantas veces quieran, de manera que se puede comenzar seleccionando un determinado abanico de opciones e irlas reajustando progresivamente, en función de “cómo vaya evolucionando la experiencia”.

lunes, 14 de abril de 2014

Algunas aclaraciones y recomendaciones sobre el uso de Facebook (I)

A la hora de hacernos presentes en Facebook, como Centros Educativos suelen ser numerosas las dudas que nos surgen en torno a cuestiones de funcionamiento, seguridad, gestión y dinamización, etc.

Como punto de partida, trataremos de explicar las principales diferencias existentes entre un perfil y una página de Facebook:


¿Qué diferencia hay entre el perfil y página de Facebook?


1. Un organismo o institución no puede tener un perfil en la red social Facebook, ya que va en contra de sus condiciones de uso.

2. Un perfil siempre ha de estar ligado y representar a título individual a una persona en particular; por el contrario, una página de Facebook es el camino adecuado para representar a una empresa, organismo o institución, como es el caso de los centros educativos.

3. La responsabilidad de la creación de un página de Facebook la tiene que asumir una persona en concreto, la cual deberá estar previamente registrada (tener su perfil particular) en Facebook, si bien hacia el exterior aparecerá públicamente el nombre de la entidad titular de la página: por ejemplo, el nombre del Centro Educativo en cuestión.

4. En un perfil de Facebook tan sólo existe la opción a que haya un único administrador del mismo, que será la misma persona que haya creado su perfil; por el contrario, en una página de Facebook puede haber tantos administradores/gestores como queramos y además cada uno de ellos puede tener diferentes tipos de permiso. De esta forma, se puede combinar el que haya persona/s que estén autorizadas a hacer uso de todas las opciones de gestión, mientras que otras disfrutarán del tipo/s de permisos más limitados que se decida.

5. A un perfil de Facebook tan sólo se van incorporando los “amigos” a los que su titular “invita” a participar en su perfil y éstos “aceptan” el sumarse a él o los que solicitan dicha amistad. Por el contrario, en una página no hay “amigos”; tan sólo hay “seguidores o fans” que dirán que “les gusta” la página y se irán sumando a la misma, sin necesidad de que nadie les tenga que invitar ni de que los invitados acepten la invitación que les haga su titular; bastará con que previamente estén dados de alta con un perfil suyo personal en Facebook.

En consecuencia, por ejemplo, los alumnos o profesores de un colegio podrán decir que “les gusta” la página del Colegio y sugerir a sus amigos que digan que les gusta la página, pero no habrá vinculación ni ningún “círculo de unión” particular entre unos y otros.

6. Se supone que un perfil de Facebook estará normalmente dirigido y limitado al círculo de amigos o, al menos conocidos, de una persona; por el contrario, una página de Facebook es de carácter público y por eso se ha previsto que puede acceder a ella cualquier usuario/a de los registrados en Facebook que lo desee, ya que suelen estar concebidas con fines más bien promocionales, publicitarios, divulgativos.